Ven y ayúdame. Deja tu mujer, hijos, familia, trabajo y pasatiempos. Necesito que me ayudes por un tiempo, por ahora, indefinido. No es un trabajo remunerado, más bien te costará dinero aparte de tu tiempo que será a dedicación exclusiva al principio. Por la naturaleza del encargo no esperes muchos adeptos a lo que harás, más bien, muchos estarán en contra pues harás una labor pública que muchos funcionarios públicos sentirán les correspondía. Serás criticado y muy poco aplaudido. Posiblemente cuando termines tu misión te irás con algunos juicios. Estos nunca faltan en este tipo de encargos. Mira, en realidad no es un favor el que te pido. Ha ocurrido esta desgracia y necesitamos alguien de tu perfil para emprender la dura batalla de la reconstrucción de Chincha, Pisco e Ica tras el terremoto que acaba de desbastar la zona. Sé que no es fácil decir que sí, piénsalo. El país necesita alguien que se encargue de esto. Creemos que un empresario es la mejor persona, pues debemos ser ágiles y emprendedores. Necesitamos un líder. Tú has sido dirigente gremial mucho tiempo. Has presidido el gremio más importante del país. Has combatido el terrorismo con tus propios medios. Has sido corredor de autos, eres sin lugar a dudas una persona decidida y ejecutiva. Sí, sí, a ti te necesitamos. ¿Qué me dices? Ya, ya, bueno, mañana empiezas. Ven a buscarme y lo anunciamos…
Oye Julio, estás loco. ¿Cómo vas a aceptar este encargo? Te van a crucificar. Tu empresa va bien. ¿Quién se va a hacer cargo? No vas a sacar nada bueno de esto. Ya estás para retirarte de estas actividades. Es irresponsable aceptarlo. ¿Qué hay de tu salud? Vas a perjudicarnos a todos porque no vas a triunfar y los empresarios quedaremos mal…
¿Cuántos podríamos hacer esto si alguien nos lo pidiera? ¿De los que pudiéramos, cuantos estaríamos dispuestos a hacerlo? ¿Serías tú uno de ellos? ¿Te arriesgarías?
Por estos motivos escribo estas líneas porque sin duda alguna, Julio Favre es uno de ellos. Tras 8 meses de realizar una labor que como se supo desde un principio fue incomprendida, discutida, insultada y amenazada, ha dejado el cargo de Presidente de FORSUR para que otros lo continúen. Hizo lo que se le pidió; organizó y planeó para que la administración pública haga las obras. No puso una sola piedra, ni inauguró alguna obra, como se suele hacer para hacerse notar. No, su labor no fue silenciosa, porque estuvo en todos los periódicos, revistas y canales de televisión, pero fue de estratega. La labor menos comprendida.
GRACIAS JULIO
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